Piden tres años por robar un retablo del s. XVII en la capilla de una casa de Hoznayo que arrendó y no pagó
La acusación particular solicita el doble de años de prisión

La Fiscalía de Cantabria pide una pena de tres años de cárcel a un hombre por apropiarse de un retablo del siglo XVII y otros enseres religiosos de similar antigüedad que estaban en una capilla de una casa-palacio de Hoznayo que había arrendado y cuyos recibos no pagó.
Además, está acusado por propinar un empujón contra el pecho y apartar violentamente al propietario del inmueble que, con motivo del lanzamiento, se personó en el lugar para comprobar qué efectos dejaba y cuáles se llevaba.
El juicio se celebrará este martes, 17 de junio, a las 9.30 horas en la Sección Primera de la Audiencia Provincial, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC).
CONFESIONARIO, BANCOS, ATRIL, CRISTO Y ALTAR
Según el escrito del ministerio público, el procesado suscribió un contrato de arrendamiento y otro de compraventa con los propietarios de una casa-palacio situada en Hoznayo.
En la misma había una capilla con un retablo barroco, un confesionario, bancos de iglesia, un atril, un cristo de hornacina y un altar.
El acusado dejó de pagar la renta y tampoco cumplió las condiciones del contrato de compraventa, por lo que los propietarios acudieron al juzgado, que determinó la obligación de devolver el inmueble y su contenido.
La Fiscalía explica que antes de que tuviera lugar el lanzamiento, el acusado procedió a desmontar el retablo y se lo llevó junto al resto de efectos religiosos, cuyo valor se estima en 61.000 euros.
Con motivo del lanzamiento, el propietario del inmueble se personó en el lugar para comprobar qué efectos dejaba el procesado y cuáles se llevaba. Entonces, el implicado, "con afán de impedírselo, le propinó un empujón contra el pecho apartándole violentamente".
DELITOS Y PENAS
Para el ministerio público los hechos constituyen un delito de apropiación indebida y otro leve de maltrato de obra, merecedores de tres años de prisión y 5.700 euros de multa.
Además, en concepto de responsabilidad civil solicita que el acusado indemnice a los propietarios en 61.000 euros, el valor de los efectos sustraídos.
Por su parte, la acusación particular califica los hechos como un delito continuado de apropiación indebida y otro leve de amenazas. La pena solicitada asciende a seis años de cárcel y 5.400 euros de multa, así como una indemnización de 63.000 euros.
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